DA UN APOYO PLACENTERO A TU CERVICAL
La almohada viscoelástica Cervical es la que mayor adaptabilidad tiene. Gracias a su composición, está diseñada para aliviar las presiones en el cuello y cervicales, favoreciendo la circulación sanguínea.
VOLVER
Las almohadas cervicales ayudan a descansar mejor porque ayuda a disminuir el dolor cervical... ver más
La almohada viscoelástica Cervical es la que mayor adaptabilidad tiene. Gracias a su composición, está diseñada para aliviar las presiones en el cuello y cervicales, favoreciendo la circulación sanguínea.
Las almohadas cervicales ayudan a descansar mejor porque ayuda a disminuir el dolor cervical.
Existen diferentes tipologías de almohada cervical que varían en función del material del que están realizadas. Las más demandadas son las almohadas viscoelásticas ya que aportan un descanso óptimo con un soporte muy ergonómico en la cabeza y a nivel de cuello.
Debes tener en cuenta que se ajusten a tu forma de dormir. Si duermes hacia arriba necesitas una almohada de menor grosor y si duermes de lado tiene que ser lo suficiente gruesa como para que no acabes recostado en el hombro.
El beneficio más importante que nos ofrecen las almohadas cervicales es que contribuyen a mejorar el sueño aliviando las tensiones del cuello y los hombros. Su diseño además ayuda a que la sangre llegue mejor al cerebro y en mayor cantidad por lo que ayuda a evitar jaquecas y dolores de cabeza. Estos almohadones son muy cómodos ya que cuentan con facilidad para doblarse.
El dolor cervical evita que la persona pueda conciliar el sueño. Si no sujetamos la columna cervical de manera apropiada aumentará su inestabilidad. Cuando el dolor es crónico el empleo de estas almohadas puede controlar y erradicar el dolor en el cuello.
Su objetivo es que tengas el cuello alineado con la cabeza mientras duermes para evitar el dolor reduciendo la presión que se ejerce sobre el cuello. Una buena almohada cervical deberá apoyar la parte posterior del cuello y de la cabeza.
Debido a la cantidad de horas que pasamos durmiendo (de 6 a 9 horas) es muy importante elegir una almohada de calidad que se ajuste a nuestras necesidades. Elegir mal este elemento puede producirnos dolor de cabeza, de cuello, problemas cervicales y dolor de espalda. Tener en cuenta la calidad de una almohada es tan importante o más que la de nuestro colchón por lo que no debemos olvidarnos ni de una ni otra para un descanso perfecto.