¿Existe una relación entre el sueño y la ansiedad? ¿puede más sueño, o mejor sueño, ayudar a reducir su experiencia diaria de ansiedad?
¡La respuesta es sí!
Siempre se ha sabido que el poder del sueño es significativo, pero ahora hay más y más evidencia que demuestra cuán importante es para aquellos que experimentan ansiedad.
Según los investigadores de la Universidad de Manchester, las personas que duermen por períodos de tiempo más cortos y se acuestan más tarde a menudo experimentan pensamientos negativos más repetitivos que aquellos que duermen más. Y después de un estudio interesante fuera de los EE.UU. también hay evidencia significativa que sugiere que estar privado de sueño produce una mayor respuesta de ansiedad a las señales externas.
Significa que menos sueño te va a poner más ansioso. Luego, también se evaluó a los participantes con base en sus niveles de ansiedad existentes, y el estudio sugirió que los que tienen ansiedad existente podrían experimentar una ansiedad peor después de la privación de sueño.
Lo que es más, el sueño es integral para mantener un funcionamiento emocional y social saludable. Los estudios han demostrado que casi todos los sistemas del cuerpo se ven afectados por la calidad y cantidad de sueño que tiene una persona, especialmente el cerebro.
La cantidad de horas que duerme cada noche también determina qué tan bien puede lidiar con el estrés y la ansiedad, destacando que la privación de sueño crea un desequilibrio en los niveles hormonales que eleva los niveles de ansiedad y exacerba los problemas de ansiedad existentes.
¿Son todas malas noticias?
Ahora que entiende lo importante que es el sueño para su salud mental, puede empezar a convertirlo en una prioridad. Reflexione sobre su rutina actual a la hora de acostarse y sus prácticas de sueño. ¿Duerme lo suficiente? ¿Tienes siquiera una rutina?
Estos son algunos consejos sencillos que pueden ayudarle a protegerse de la ansiedad inducida por la falta de sueño.
Paso 1: Elabore un plan
Lo primero que hay que saber es que 7-8 horas es una cantidad saludable de sueño para la mayoría de los adultos. Así que empieza a hacer un plan para conseguir esa cantidad. Averigua a qué hora tienes que levantarte, y vuelve a trabajar a partir de ahí. Y no sólo ponga una alarma para levantarse, sino también para acostarse, de modo que siempre sepa cuándo es el momento de comenzar su rutina nocturna.
Paso 2: Iniciar una rutina nocturna
Esto no tiene que ser nada elegante. No tienes que empezar a beber té de manzanilla si no quieres (aunque puedes si quieres) y no tienes que acostarte en la cama contando ovejas. Se trata de establecer una pequeña rutina que le indica a tu cerebro y a tu cuerpo que es casi la hora de dormir. Así que escoge lo que quieras – tal vez es sólo cepillarte los dientes y leer un libro durante diez minutos, o tal vez es una pieza particular de música o meditación.
Paso 3: Evite pasar una hora frente a la pantalla antes de acostarse
Esto incluye teléfonos, tabletas, todo. Comprometerse a evitar luces poco útiles de las pantallas le ayudará a tener éxito con su nuevo plan.
Paso 4: No es sólo de noche: piense en cómo pasa el día
Algunas de las cosas básicas incluyen evitar la cafeína por las tardes, reducir los cigarrillos y el alcohol (pueden afectar su sueño REM). Más allá de eso, haga lo mejor que pueda para hacer algo de ejercicio – contribuye a dormir bien por la noche y también es bueno para los niveles de ansiedad de todos modos, ya que libera endorfinas muy importantes.
Si la ansiedad le está molestando, es una buena idea examinar sus patrones de sueño. Después de todo, sabemos que dormir bien lo pone en una mejor posición para protegerse de la ansiedad del día a día.
Pruebe estas cosas, y no se olvide de contactar a un profesional si necesita apoyo; si se siente ansioso acerca del sueño en sí mismo y piensa que podría estar sufriendo de síntomas de insomnio, es una buena idea ponerse en contacto con un profesional de la salud que pueda hablar con usted acerca de lo que está experimentando y cómo obtener la mejor ayuda.
No olvide que hay mucho apoyo disponible para una amplia gama de problemas de sueño y salud mental, así que no posponga la obtención de la ayuda que necesita.